Universal Genève
Antes de que el mundo conociera los iconos de Rolex o Patek Philippe, existía Universal Gen ève, una casa venerada entre los entendidos, pero oculta discretamente a plena vista. Fundada en 1894, Universal Genève fue aclamada en su día como "la relojería de los relojeros", fabricando cronógrafos y complicaciones que marcaron la pauta del siglo XX.
Entre los coleccionistas de Reloj Antiguo , el nombre Universal Genève evoca algo especial. No prestigio de masas, sino pureza. No exageración, sino herencia. Sus legendarios cronógrafos -desde la línea Compax hasta el grácil Tri-Compax, desde el elegante Aero-Compax hasta el venerado Uni-Compax- combinan el ingenio mecánico con un lenguaje de diseño inconfundible. Equilibrado. Sobrio. Icónica.
Luego está el Polerouter, una maravilla del diseño de mediados de siglo nacida de un joven Gérald Genta. Creado para los pilotos que cruzaban la ruta polar hacia Los Ángeles, es un símbolo de aventura y precisión. Con sus dinámicas esferas en forma de cruz, sus asas retorcidas y su movimiento de micro-rotor, el Polerouter es uno de los Relojes Vintage más queridos jamás fabricados.
Universal Genève no perseguía el respaldo de los famosos. No lo necesitaban. Sus relojes hablaban por sí solos: en la cabina, en la sala de juntas y, ahora, en las vitrinas de los coleccionistas que realmente saben.
Llevar un Universal Genève vintage es señal de algo poco común: gusto exigente. Usted no persigue el estatus. Usted preserva el legado. Usted comprende que la verdadera belleza reside en los detalles: asas biseladas, proporciones elegantes, movimientos acabados con esmero.
No son relojes que gritan. Hablan, con la voz de una época dorada olvidada de la relojería suiza.
Y en el ruidoso mundo de hoy, esa voz está siendo redescubierta - un coleccionista, un Reloj Antiguo, un momento de tranquila admiración a la vez.
Porque Universal Genève puede haber pasado desapercibida para el gran público...
Pero entre los que saben, nunca se olvidó.